Escarabajos.
El mundo de los coleópteros, de los escarabajos, es de una magnitud impresionante. Una de cada cuatro especies de animales que pueblan la tierra es un escarabajo. Se trata, por tanto, de una prueba del éxito evolutivo de estos insectos en el correr de los tiempos del Planeta Tierra. Pero ¿cómo han alcanzado ese nivel de perfección animal? En las líneas que siguen vamos a comentar cinco claves para entender ese éxito.
-Variedad. Hay escarabajos de todos los tipos imaginables. Algunos son sorprendentemente pequeños, insectos raros, otros tienen un tamaño que llega a alcanzar la longitud de una mano abierta y bien extendida. Una gran parte son escarabajos duros, robustos, armados con un exoesqueleto que les proporciona protección natural contra los entornos agresivos, pero también contra sus depredadores naturales.
-Armados de armadura. El origen de esta armadura, o una parte de ella, la superior, hay que encontrarlo en la transformación evolutiva de dos pares de ala próximas a la cabeza y situadas en la espalda que primero dejaron de ser funcionales y luego pasaron a endurecerse y generar protección.
-Vuelo controlado. En cualquier caso, bajo esta sección dura de su espalda aún pervive en algunos escarabajos alas funcionales que les permiten dar saltos muy largos, realizar vuelos controlados y desplazamientos ocasionales por vía aérea a costa de un gran gasto de energía pero vital para zafarse de cualquier amenaza.
–Escarabajos en todo el mundo. Los escarabajos viven prácticamente en todos los entornos naturales, por no decir en todos. Se han encontrado en ambientes tan hostiles como las dunas de los desiertos o en puntos tan complicados para la vida como los hielos de la Antártida.
-Alimentación sin remilgos. Los escarabajos se alimentan de una gran variedad de recursos comestibles disponibles, desde insectos vivos, a materia en descomposición sin olvidar madera y frutos y vegetales aprovechados por el hombre. Cuando esta alimentación entra en conflicto serio con las necesidades de producción alimentaria del hombre, lo llamamos plaga.
Pero también, todo hay que decirlo, hay escarabajos beneficiosos, en la medida en que se alimentan de los insectos, o de las larvas de ellos, que atacan los cultivos de interés humano.
Los escarabajos en 5 adaptaciones naturales.
Un carábido devorando una lombriz.
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